De un tiempo atrás aquí, en España hay una gran
desconformidad con la RAE por haber aceptado en el diccionario los términos “almóndiga”
y “cocreta”. Ciertamente de estos dos términos culinarios cuya forma correcta respectivamente
es “albóndiga” y “croqueta”, sólo ha sido aceptado por la RAE “almóndiga”. Es
aquí cuando realmente empieza el debate de por qué una sí y la otra no, o
simplemente de por qué aceptar una palabra que no es correcta.
Muchos dicen que al haber aceptado este vocablo, la RAE está
fomentando la incultura, o mejor dicho, cultura de a pie, ya que una de sus
justificaciones tras haberla aceptado fue que es un término muy utilizado en
determinadas áreas españolas durante mucho tiempo, pero que no por ello deja de
ser una forma vulgar de hablar y desaconseja utilizarla. Otros en cambio alaban
esta aceptación y opinan que también debería ser aceptada la palabra “cocreta”
alegando que es un término utilizado desde hace más de un siglo atrás y que ha
sido muy utilizada durante la historia, o también diciendo que perfectamente
podría haber triunfado la forma vulgar, del mismo modo que la forma más
culta “crocodilo” no pudo con “cocodrilo”, o así
como “crebar” sucumbió ante “quebrar.”
Tras saber esto, ¿tú qué opinas? ¿Debería aceptar el
diccionario ambos términos o ninguno?
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